Reseña de la primera temporada del anime Spy x Family
Escribe: @planet.urkh
Para los fans de Austin Powers. Para los de James Bond. Para los shonen. Para los curiosos. Para los humoristas. Para los que se aguantan las risas. Para los que siguen las modas. Para los que vieron los memes. Para los que leyeron el manga. Para los cosplayers. Para los tsundere y para los yandere. Para los senpai. Para los que buscaban waifu. Para las que pedían husbando. Para las kawaii. Para los que vuelven al anime. Para los que nunca se fueron. Para los de siempre. Para los otakus.
Memes de familia
Nadie ha podido esconderse de la invasión Spy x Family. Memes de Anya trolleando personajes famosos de animes populares. Cosplays de Yor para tu colección de waifus. Juguetes, almohadas, peluches y más llenando las tiendas otaku. En cualquier red social el escuadrón de fans no se cansa de repetir: “Es increíble, es lo mejor de la temporada. Tienes que verlo. Waku Waku.” Etcétera, etcétera, etcétera. Y sí, no se equivocan, es así de buena.
Un espía. Una asesina. Una niña telépata. No me esperaba una historia como esta. Twilight, el espía de las mil caras, tiene una nueva misión: infiltrarse en una prestigiosa escuela privada para detener a Desmond, líder del país enemigo Ostania. Solo un obstáculo se interpone en su camino: no tiene una familia, tampoco una hija, así que su fachada para acercarse al alto mando se derrumba. Adiós misión. Pero Twilight hará lo que cualquier hombre respetable y desesperado haría en su lugar, inventar una familia. Bajo el nuevo nombre de Loid Forger, el espía va directo al orfanato y adopta a Anya, una extraña niña de pelo rosa con el poder de leer mentes. Y para completar la foto familiar falta la esposa.
Vayamos al otro lado de la ciudad. En el penthouse de un lujoso hotel, una asesina elegante se limpia la sangre luego de rebanar a un grupo de matones. Les presento a Yor Briar, alias Thorn Princess. Bajo la ropa de dominatrix se esconde una tímida mujer bastante solitaria. Su peor enemigo no son otros asesinos, sino sus horribles compañeras de trabajo. No existen mujeres más diestras en el sutil arte de joder a diario. Envidiosas, criticonas, metiches, el paquete completo de señoras frustradas. “¿Una soltera de casi treinta años? ¿Cómo es eso posible? Esta mujer debe esconder algo. Es demasiado sospechosa”, piensan las señoras chismosas. Así es la vida en nuestra querida Yor en la oficina. Ella debe encontrar con urgencia una pareja para mantener una imagen respetable ante la sociedad. O llamarán a la policía. Como por accidente, y con un poco de la ayuda de Anya, el espía y la asesina se conocen y cierran el trato. Loid le pide a Yor ser su esposa de la forma más espectacular posible (explosiones incluidas). Y claro, ella acepta. ¿Por qué no? Ambos están desesperados. Así empiezan las aventuras de la familia Forger.
Misión Waku Waku
Siempre he preferido las familias encontradas (o found families como dicen los gringos). Son como piezas de Lego que juntas forman algo divertido. En muchas historias los integrantes de una familia son nada más que roles. Este es el padre, esta es la madre, estos son los hijos. Funcionan como etiquetas, papeles forzados que los personajes interpretan. Pero esto no te transmite el cariño, el enojo, la frustración y el apoyo de una verdadera familia.
Hay un detalle curioso con los Forger. Son una familia de huérfanos. Loid se quedó solo cuando era niño. Yor perdió a sus padres siendo muy joven. Anya fue el experimento de una organización secreta. Eran tres piezas rotas que juntas formaron un hogar. No los une la sangre, sino el cariño. Vale más la decisión de construir ese vínculo voluntariamente para seguir unidos.
El encuentro de estos extraños personajes da lugar a mucha comedia. Todo siempre se lleva al límite. Ahora una serie de spoilers como metralleta: Un niño con el cuerpo de un cuarentón jugando dodgeball. Espías con ataques de ansiedad. Un hermano demasiado cringe obsesionado con su hermana. El niño tsundere vs la nueva Baby Yoda en versión anime. Una asesina tímida peleando como Rock Lee. Todo en un empaque familiar.
Spy x Family es una vuelta creativa a las sitcom americanas. Tenemos un trío de personajes fuera de su zona de confort. Yor, la asesina más hardcore, y Loid, el mejor espía del mundo, son expertos en lo que hacen, pero cuando se juntan son un increíble desastre.
Loid no estaba preparado para la misión Waku Waku. Su habilidad para calcular todo al detalle de nada le sirve cuando se trata de criar una hija impredecible. Yor carece de habilidades sociales, casi todo lo resuelve con golpes, cuchillos y patadas. A donde vaya se siente extraña e incómoda, optando siempre por la soledad. Pero encuentra su lugar en el mundo protegiendo a Anya, poco a poco se convierte en una madre amorosa que le enseña a pelear. Y nuestra querida Anya, tiene un increíble poder telepático, pero carece de la habilidad para sacarle provecho y solo ocasiona más problemas. Pero ella se divierte como si su vida fuera una película. Es la única que conoce los secretos de sus padres y le encanta tener a un espía y una asesina como sus protectores. En el mundo de Anya la vida es como en las caricaturas, llena de acción y aventuras.
Todo lo vemos a través de los ojos de Anya, con la esperanza e ingenuidad de los niños. Para ella cada día es algo nuevo, cada misión de Loid la vive como si fuera un juego. Ver este anime te recuerda la experiencia de ser niño y solo disfrutar la vida. Es la clase de historia alegre para curar tu depresión, luego de un interminable día de trabajo o estudios. Spy x Family terminó por ahora y siento que algo me faltará cada semana. Después de la primera parte de esta primera temporada, solo espero hasta octubre para seguir disfrutando las aventuras de mi familia favorita del anime.